jueves, 5 de junio de 2014

Cecilia Tait denuncia interceptación telefónica


Congresista dijo que ni ella ni su asesora, Sara Miranda, compartieron con terceros los mensajes de texto que hoy presentó Cenaida Uribe.

La congresista nacionalista Cenaida Uribe presentó esta mañana unos mensajes de texto que –a su juicio– prueban que su colega Cecilia Tait está empeñada en no dejarla trabajar, al punto de haber asignado específicamente a una de sus asesoras la tarea de ubicar en qué colegios de Lima hay paneles publicitarios de la empresa Punto Visual para intentar perjudicarla.

En los mensajes, Tait y su colaboradora Sara Miranda discuten sobre los colegios en los que se ubican los anuncios de la referida empresa, a favor de la cual Uribe habría ejercido presión en el colegio Alfonso Ugarte para la renovación de un contrato por los paneles. Por ello, la nacionalista fue investigada en la Comisión de Ética, aunque el caso quedó archivado a través de un escandaloso blindaje.

Tait muestra los mensajes en el celular.

Lo que no explicó Uribe es cómo tuvo acceso a los mensajes de WhatsApp (servicio gratuito de mensajería para celulares) almacenados en los teléfonos de la congresista de Unión Regional y de Miranda. En una entrevista que Perú21 hizo hoy a Cecilia Tait, su asesora negó haber compartido las conversaciones.

“Sí (el teléfono fue interceptado) Es un acto ilegal, estamos viendo si es una violación al secreto de las comunicaciones. Quizá es un nuevo negocio. De los paneles pasamos a la interceptación telefónica. Tal vez sea para distraer la atención, pero no me preocupa”, dijo Tait al periodista Gonzalo Pajares.

En la conversación, la legisladora respaldó a su asesora, presente durante la entrevista, y descartó que esta haya entregado los mensajes a Uribe. “Sarita trabaja conmigo hace varios años y lo que esto comprueba es que algo extraño está sucediendo: tengan cuidado, el WhatsApp no es lo más seguro”, apuntó.

Estos son los mensajes que presentó Uribe.

Esto deja abiertas dos posibilidades: o alguien tomó el teléfono de Sara Miranda en un descuido o el equipo fue interceptado, es decir, ‘hackeado’. La primera alternativa es hasta ahora la más probable, pues Cenaida Uribe mostró en sus imágenes un teléfono que era cogido por una tercera persona. Luego explicó a Perú21 que se trataba de su propia mano.

“No voy soy la persona encargada de ver eso (si Uribe ordenó la supuesta interceptación), habrá quienes se encargarán de hacerlo y se pronunciarán sobre el tema legal. Una persona que ligeramente muestra unos mensajes por WhatsApp –que no niego, porque estoy haciendo mi trabajo– es peligrosa”, enfatizó.

De otro lado, Tait informó que consultará con su abogado qué acciones tomará y precisó que denunciará el caso ante la Comisión de Ética en cuanto esta se instale nuevamente. El caso Punto Visual y el blindaje a Uribe desataron el martes una crisis en este grupo de trabajo tras las renuncias de su presidente, Humberto Lay, y de otros miembros.

Fuentes: Peru21.pe (y vídeo de 24HorasPTV)

martes, 3 de junio de 2014

Humberto Lay descarta reconsiderar su renuncia a Comisión de Ética


El congresista Humberto Lay descartó reconsiderar su renuncia a la presidencia de la Comisión de Ética, como se lo sugirió la ministra de Trabajo, Ana Jara, porque aseguró que en ese grupo parlamentario priman los criterios políticos y las lealtades partidarias.
Fue al ratificar su decisión y comentar lo ocurrido recientemente en la Comisión de Ética, que archivó por mayoría el informe de la secretaría técnica que pedía suspender por 120 días a la congresista Cenaida Uribe por el caso de la empresa Punto Visual.

“No puedo participar de una comisión donde las decisiones que toman son políticas (…) La comisión ya perdió su razón de ser”, expresó el legislador.

Además, reafirmó su posición respecto a que en el caso Punto Visual, que involucra a Cenaida Uribe, hubo un aparente "blindaje", y expresó su desacuerdo con que se haya elevado de siete a 15 el número de miembros de esa comisión, con el argumento de la proporcionalidad.

Sin embargo, Lay Sun remarcó que en los dos últimos años el grupo de trabajo a su cargo trabajó “muy bien” y con pluralidad, hasta que se decidió elevar el número de sus miembros, pese a que se trataba de una comisión especial y no política.